41 ANYS A VALENCIA- 41 AÑOS EN VALENCIA

DICIEMBRE DE 1975, ESTA SOY YO AL PRINCIPIO DE VIVIR EN VALENCIA DONDE ME HICIERON ESTA FOTOGRAFÍA

Y ESTA SOY YO ESTAS NAVIDADES, 41 AÑOS DESPUES DE HABER VENIDO A VIVIR EN VALENCIA
FELIÇ ANY NOU:

Diuen que no serveix per res recordar, tenim que netejar els records, que només hi ha que viurer el present.
Jo no vull olvidar, m´agrada recordar, perque el meu present te que veurer molt en el meu passat.
No vui  borrar, son les meves págines viscudes, on hi ha una mica de tot.
Recordo aleshores quan  amb els nens petits vinguerem a Valencia, anar vivin el día a día, fen el nostre caminet.
Hi hagut situacions de tota mena, pero la Fe amb Deu, jo sempre dic que per mi es la millor terapia, m´ajudat a tirar endavan, al costat del meu estimat company, vull dir marit, el día 28 d´aquest més fara 47 anys que ens varem casar.
He conegut a diversitat de persones, bones i no tan bones, de totes menes i colors, lo de colors ho dic perque soc voluntaria de Cárites.
De vegades reconec que he sentit rabia per coses, pero practican el perdó m´he lliberat.
Si aprenguessim a relativitzar les coses, en aquest mon no hi haurie tantes envejes que fan mal a les persones, seriem més solidaris i ens alegreriem del be del proxim, aixó dona benestar i pau interior.
PAU I BE
Desde Valencia amb carinyo

FELIZ AÑO NUEVO:
Dicen que no sirve de nada recordar, tenemos que limpiar los recuerdos, que solo hay que vivir el presente.
Yo no quiero olvidar, me gusta recordar, porque mi presente tiene que ver mucho con mi pasado.
No quiero borrar, son mis páginas vividas, donde hay un poco de todo.
Recuerdo entonces cuando los niños eran pequeños vinimos a Valencia, yendo día a día haciendo nuestro caminito.
Ha habido situaciones de toda manera, pero la Fe en Dios, yo siempre digo que para mi es la mejor terapia, me ha ayudado a ir hacia adelante, al lado de mi compañero, quiero decir marido, el día 28 de Enero hará 47 años que nos casamos.
He conocido diversidad de personas, buenas y no tan buenas, de todas maneras y colores, lo de colores los digo porque soy voluntaria de Cáritas.
A veces reconozco que he sentido rabia por cosas, pero practicando el perdón  me he liberado.
Si aprendiéramos a relativizar las cosas, en este mundo  no habría envidias que hacen daño a las personas, seríamos más solidarios y nos alegraríamos del bien del prójimo, esto da bienestar y paz interior. 
PAZ Y BIEN
Desde Valencia con cariño, Montserrat Llagostera Vilaró